Tegucigalpa – La lucha contra la corrupción y la impunidad, la toma de decisiones inconsultas y los problemas fiscales sacuden a la región centroamericana desde el Triángulo Norte hasta la parte sur del istmo, donde la sorpresa la ha dado Costa Rica, cuyo gobierno enfrenta una ola de protestas y huelgas por una reforma fiscal que busca sacar al país de la crisis económica en que se encuentra.
En Guatemala, un segmento amplio de la población sale a las calles en contra de la decisión del presidente Jimmy Morales de impedir la continuidad de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), así como el ingreso al país de su coordinador, el colombiano Iván Velásquez, por considerarlo “enemigo” de la seguridad nacional, un hecho que ahora se ve confrontado con una decisión de la Corte Constitucional.
La decisión de Morales es respaldada por otros sectores y gran parte de las elites guatemaltecas que han sido sacudidas y afectadas por la CICIG, entre ellos los militares que se han cuadrado en torno del presidente Morales, último investigado por financiamiento ilícito de campaña, en tanto uno de sus hijos y un hermano del gobernante están en prisión preventiva por ilícitos. Morales y su círculo familiar han sido golpeados por la CICIG.
Iván Velásquez, de la CICIG, y Jimmy Morales, presidente de Guatemala.Washington, un actor protagónico en el Triángulo Norte, contrario a otras ocasiones, ha mantenido una inusual cautela y dio un espaldarazo a Morales al decir que “respeta” su “soberanía” y que seguirán luchando contra la corrupción con una CICIG “renovada”. Ello ha provocado una reacción airada de algunos senadores demócratas y republicanos que anuncian gestiones al respecto al condenar las acciones del presidente guatemalteco Morales.
Pero la administración del presidente estadounidense Donald Trump no quiere darle un “cheque en blanco” a Morales y las élites de ese país y envió un mensaje que la corrupción no será tolerada.
Agentes del FBI, la policía federal estadounidense, detuvieron al dos veces excandidato presidencial guatemalteco Manuel Baldizón, que se encontraba en un centro en Miami, acusado por la justicia norteamericano de lavado de activos.
Baldizón enfrenta cargos en Guatemala imputados por la CICIG de recibir 1.2 millones de dólares en coimas por el caso Odebrecht, por el cual es requerido en su país.
El excandidato a la Presidencia de Guatemala, Manuel Baldizón.Guatemala enfrenta así una decisiva batalla anticorrupción externa e internamente, al grado que la gente ha vuelto a las calles, el presidente Morales ha tenido que hacer uso de la fuerza elite Kaibiles para resguardar las protestas y en algunos poblados Morales ha tenido que pasar el trago amargo de que le declaren non grato.
En tanto, las Naciones Unidas -instancia de donde depende la CICIG- ha ratificado una vez más a Iván Velásquez en la coordinación y le pide que coordine su trabajo desde el exterior, lo cual ha estado haciendo en conjunto con la Fiscalía.
La condena y los cheques de Saca
En el Salvador, por primera vez un expresidente ha sido condenado por corrupto. Es el hombre de las comunicaciones deportivas, Elías Antonio Saca, quien confesó haber cometido delito y logró una pena de 10 años tras aceptar que se apropió indebidamente de millonarios fondos públicos.
Mientras esto ocurría, el medio digital El Faro revelaba más de dos mil cheques que fueron parte de la repartición de recursos públicos que hizo el exgobernante, algunos de los cuales fueron a dar a un grupo elite de militares que creó como parte de su seguridad personal. Algunos confesaron haber recibido el dinero y que lo usaron para viáticos, remodelaciones, entre otros. Así hubo cheques también para campañas y ONG de fachadas.
El expresidente salvadoreño Saca cumple 10 años de cárcel.La condena de Saca ha golpeado a las élites políticas salvadoreñas, mientras la Fiscalía anunciaba la petición de extradicióndesde Nicaragua del expresidente Mauricio Funes, su compañera de hogar y sus hijos, por delitos de corrupción similares a los cometidos por Saca.
Tras varios meses de pesquisas y contraste de información y testimonios, la Fiscalía logró armar un caso contra Mauricio Funes, del gobernante partido FMLN, y con ello ha demostrado que la corrupción permeó a los gobiernos de derecha y de izquierda. Elías Antonio Saca llegó al poder por el partido ARENA, de derecha, de donde fue expulsado.
La lucha anticorrupción en El Salvador cobra fuerza en medio de una campaña política electoral de cara a las elecciones generales a inicios de 2019, donde los partidos de izquierda y derecha buscan sacar provecho a los golpes que han recibido, en medio de una sociedad polarizada por la inseguridad, la violencia y la corrupción.
Honduras apuesta por un diálogo
En Honduras, la lucha contra la impunidad y la corrupción tiene también de correr a ciertos sectores políticos por los trabajos del Ministerio Público y MACCIH en casos que implican a personalidades políticas entre diputados, funcionarios, exfuncionarios e incluso una exprimera dama. Las batallas que se libran están en los tribunales y los legisladores han diseñado una especie de blindaje con el empuje de leyes y reformas.
Honduras comenzó hace unas semanas su Diálogo Político.Al par, se ha instalado en el país una mesa de Diálogo Político para dirimir las diferencias del pasado proceso electoral de 2017, llegar a consensos que permitan reformas estructurales y políticas electorales que eviten situaciones de convulsión como viven varios países en el resto de la región.
Ortega se aferra al poder
Nicaragua sigue convulsa desde hace más de tres meses, la gente no solo está en las calles, también se ha enfrentado a las fuerzas del orden dirigidas por el presidente Ortega, a quien piden su dimisión. La confrontación ahí está a punto de profundizarse y algunos temen incluso en que termine en una guerra civil.
El autoritarismo de Daniel Ortega ha causado casi medio millar de muertes, las condenas de la comunidad internacional, la confrontación con la Iglesia Católica, agresiones a líderes religiosos, numerosos presos políticos y la puesta de políticas represivas y autoritarias que hacen de esa nación un volcán en efervescencia.
Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo mantienen en inestabilidad política a Nicaragua.Ortega ha instalado una dictadura democrática que tuvo su quiebre en una serie de medidas que impulsó el gobernante, entre ellas una reforma a la seguridad social que fue el vaso detonante del estallido, y aunque revirtió la medida, el autoritarismo gubernamental le está pasando factura.
Paquetazo sacude Costa Rica
Así la región, la sorpresa la ha dado la pacífica Costa Rica, donde los grupos sindicales han declarado una huelga por la inminente aprobación de un paquete de reformas fiscales necesarios para evitar que ese país caiga en una crisis financiera profunda. Los huelguistas están dispuestos a acampar en los bajos del poder legislativo como presión para impedir el paquete fiscal de reformas.
Algunas de las reformas propuestas incluyen aumento a los impuestos para servicios profesionales de abogados, las estéticas, los conciertos, los servicios como Netflix y Spotify, aumentos a las tarifas de luz y agua, productos alimenticios, entre otras medidas, lo cual ha calentado los ánimos en la población.
En Costa Rica los huelguistas están dispuestos a acampar en los bajos del poder legislativo como presión para impedir el paquete fiscal de reformas.Las protestas se intensificaron la última semana a tal grado que las fuerzas policiales ingresaron a la universidad nacional de Costa Rica, violando su autonomía, y ello desató los cuestionamientos públicos. El recién estrenado presidente, Carlos Alvarado, juega en los equilibrios por llegar a acuerdos que permitan la reforma y los huelguistas se han tomado carreteras, acceso a puertos e incluso al aeropuerto capitalino obligando a los turistas a caminar algunos tramos con sus maletas para no perder los vuelos.
También allí los expresidentes han vuelto a sonar cuando en agosto trascendió que el expresidente y Premio Nobel de la Paz 1987, Óscar Arias Sánchez, enfrentaba una acusación penal por aparente prevaricación en favor de un proyecto de extracción de oro en la zona norte del país.
La imputación indica que él impulsó ilegalmente en 2008 el proyecto canadiense Crucitas, que después quedó nulo, desatendido y diferido de arbitrajes internacionales.
También la violencia y el narcotráfico ponen a Costa Rica en una realidad compleja. De esta forma, la región centroamericana experimenta de un tiempo acá procesos de inestabilidad ligados a políticas fiscales inadecuadas, medidas autoritarias desmedidas y redes estructurales de corrupción e impunidad que están debilitando sus democracias y aumentando la desconfianza en sus situaciones, volviendo así escenarios inciertos de salidas y solución a la crisis.Autor del artículo: Especial Proceso Digital
