Epidemióloga: «lo más prudente era vacunar el personal que labora en UCI y sala COVID»

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Tras la denuncia que se vacunó a una relacionadora publica, un asesor legal, un administrador, un sindicalista y secretarias, la epidemióloga y exministra de Salud, Roxana Araujo, dijo este domingo que lo más prudente era iniciar con la vacunación anticovid con el personal que labora en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) y las a SU CRITERIOsalas COVID-19.

En torno a la donación de 5 mil dosis para vacunar a los primeros 2 mil 500 sanitarios hondureños, refirió que debido a que la cantidad era poca lo más prudente era inocular a los que laboran en las salas de cuidados intensivos de las salas COVID-19.

Sobre la denuncia que personas que no están en primera línea han sido vacunados, Araujo interpretó que la denuncia tiene un fundamento específico en la necesidad que tiene el personal sanitario de primera línea en poder ser inmunizados, esto como una de las principales medidas de prevención.

«Eso se esperaba cuando se anunciaron esas cinco mil dosis para vacunar a los primeros 2 mil 500 sanitarios hondureños, refirió que debido a que la cantidad era poca lo más prudente era vacunar a los que laboran en las salas de cuidados intensivos de las salas COVID-19.

“Lamentamos la denuncia si es que ocurrió de esa forma, sabemos que gran cantidad de personal médico y de  enfermería e inclusive personal de aseo que se tenía que tomar en cuenta para ser vacunado y sobre todo en las Unidades de Cuidados Intensivos”, expresó.

«Nos tenemos que unir a ese lamentable hecho, ya que eso se esperaba, no sé si se puede justificar, pero se habría que ver qué fue lo que sucedió para seleccionar personas que no son de esa primera línea de atención aunque forman parte de los hospitales”.

A su criterio, todo el personal de salud debería ser inmunizado, pero en vista de las prioridades con esa donación era esencial que las personas que están en Salas Covid y en las Unidades de Cuidados Intensivas se les diera esa prioridad.

Mencionó que entre el sector sanitario privado y público laboran unas 80 mil personas que pertenecemos a esa primera línea de combate al virus.

Señaló que “con estas primeras dosis que llegaron al país, lo ideal hubiera sido que no existiera ese velo que no satisface a la población, entonces podemos decir que queda ese sabor amargo que no se hicieron las cosas como debieron hacerse”.

«Sabemos que parte administrativa juega un papel preponderante, pero que pueden estar aislados de las salas contagiosas como lo son las Salas Covid y las UCI», indicó.

«Nosotros tenemos bajo nuestro cargo un grupo de personas muy vulnerables, que son los adultos mayores, sin embargo tengo dos enfermeras que pasan de los 60 años y me hubiera gustado que las vacunarán a las dos y los dos médicos», expresó Araujo.

Diario La Tribuna.

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