El movimiento islamista palestino Hamás y las autoridades israelíes anunciaron este lunes por la noche un acuerdo para poner fin a casi un mes de escalada casi diaria en la Franja de Gaza y sus inmediaciones.
“Después de diálogos y distintos contactos, el último de ellos con el enviado de Catar Mohamed el Emadi, se ha llegado a un acuerdo para frenar la escalada y poner fin a la agresión sionista contra nuestro pueblo”, informó en un comunicado la oficina del jefe político de Hamás en Gaza, Yahya Sinuar.
Desde el 6 de agosto el ejército israelí bombardea casi todas las noches la Franja de Gaza en represalia por el lanzamiento de globos incendiarios e incluso disparos de cohetes desde el territorio palestino hacia Israel.
Estas operaciones han causado heridos pero ningún muerto directo, con la excepción de cuatro combatientes de la Yihad Islámica, otro grupo islamista armado de Gaza, que murieron por el estallido de una bomba destinada a Israel.
En respuesta a los globos incendiarios, que provocaron más de 400 incendios en Israel según datos de los bomberos, el Estado hebreo también endureció su bloqueo a Gaza, en vigor desde hace más de una década.
En las últimas semanas, las autoridades israelíes prohibieron a los pescadores de Gaza el acceso al Mediterráneo, cerraron Kerem Shalom, el único paso fronterizo para las mercancías que circulan de Israel a Gaza, y detuvieron el suministro de combustible al territorio palestino, lo que forzó el cierre de la única central eléctrica de la Franja de Gaza.
Además de sufrir esta escalada de tensión, Gaza registró en la última semana los primeros casos de covid-19 fuera de los “centros de cuarentena” locales, lo que hace temer una rápida propagación del coronavirus en un territorio pequeño y densamente poblado, blanco de bombardeos y privado de electricidad, donde la mitad de los dos millones de habitantes son pobres.
Tras el anuncio de Hamás, el organismo de coordinación de actividades del gobierno israelí en los Territorios Palestinos (Cogat) confirmó la reapertura de Kerem Shalom, la entrega a partir del martes de combustible a Gaza y la reanudación de la pesca en el Mediterráneo en un radio de 15 millas náuticas.
– Mediadores –
Según una fuente de Hamás que pidió el anonimato, la entrega de combustible permitirá poner en marcha la central eléctrica de Gaza.
AFP/Archivos / SAID KHATIB Un grupo de palestinos atan un explosivo a globos que lanzan hacia Israel, el 21 de agosto de 2020Todas las facciones palestinas de la Franja de Gaza acordaron poner fin al lanzamiento de globos incendiarios y de proyectiles, añadió.
“Si Hamás, que es responsable de todas las medidas adoptadas en la Franja de Gaza, fracasa en sus obligaciones (de restaurar la calma), Israel actuará en consecuencia”, advirtieron el lunes por la noche las autoridades israelíes.
Una delegación egipcia viajó hace dos semanas a Gaza y a Tel Aviv para tratar de apaciguar los ánimos entre Hamás e Israel, que ya libraron tres guerras (2008, 2012 y 2014).
La semana pasada el enviado de Catar para la Franja de Gaza, Mohamed el Emadi, llevó a cabo una nueva ronda de negociaciones para evitar que la situación degenere otra vez.
El lunes El Emadi elogió el papel de los líderes de Hamás. El movimiento tuvo en cuenta “las difíciles condiciones de vida de los habitantes de Gaza, sobre todo en vista de la propagación del coronavirus”, recalcó el enviado catarí en un comunicado.
– 35 millones de dólares –
Bajo el auspicio de Catar, Egipto y la ONU, Hamás e Israel alcanzaron el año pasado un acuerdo de tregua que prevé una ayuda mensual de 30 millones de dólares, pagada por los cataríes, a Gaza, así como una serie de proyectos económicos para frenar el desempleo, que sobrepasa el 50%.
Según una fuente del movimiento, la financiación de Catar aumentará de 30 a 35 millones de dólares por mes. Y según la oficina de Yahya Sinuar, posteriormente se anunciarán “proyectos”.
Hamás quiere la ampliación de una zona industrial en Gaza y un aumento de los permisos para que los trabajadores de Gaza puedan ir a trabajar a Israel, separado del enclave por una barrera de seguridad.
El año pasado Israel concedió unos 5.000 permisos de trabajo a los gazatíes y Hamás quiere duplicar esta cifra en cuanto termine la crisis sanitaria causada por el nuevo coronavirus.
AFP Noticias en Español.
